por:Yarim Lòpez
A lo largo de mi vida, me he dado cuenta que la cultura que poseemos, de alguna forma, nos cierra mucho las puertas de ese mundo tan maravilloso que es el de la literatura y todas sus ramas existentes. El español, la lectura, la ortografía, la redacción y todo lo relacionado, son de vital importancia en toda vida estudiantil, cuantas veces nos topamos con la elaboración de un ensayo. El solo hecho de pensar de cómo vamos a llenar una cuartilla con nuestras propias palabras, nuestras opiniones, hace que la cabeza nos duela y nos impida pensar.
Los adolescentes, en especial ellos, tienen una pereza impresionante en todas las cuestiones, y se vuelve más amplia al leer. Nuestra sociedad posee jóvenes de entre doce y trece años demasiado ignorantes, incluso nos podemos topar con gente universitaria que posee las mismas características mencionadas, es increíble pensar que a ese nivel arriben personas faltas de conocimiento. Como en toda sociedad, existen esas personas que logran salir adelante, no hay que olvidar a las personas que logran, más que una satisfacción personal, una meta, creando así su propio destino.
Entonces, hemos de hablar de adolescentes, pero, qué hay detrás de eso, estamos en lo correcto, la educación primaria, es ahí donde el conocimiento y la forma de aprendizaje se desarrollan de una forma significativa. Durante la época de la educación primaria, se trata de enseñar al alumno, desde los primeros años a leer y escribir, caso que se fomenta y se trata de motivar a lo largo del ciclo escolar. Los niños aprenden a identificar textos y tomar lectura en ocasiones, dentro del salón de clases, pero qué pasa con la redacción. Muy pocas veces los maestros se toman la molestia de identificar las fallas ortográficas de los alumnos y éstos crecen con esas palabras mal escritas, y lo peor, siguen escribiendo de manera incorrecta.
Mi enfoque hacia la redacción, a la escritura en sí, surge de mi gusto por leer y por escribir, he escrito desde poemas cursis, que hablan sobre el amor o la amistad hasta textos llenos de odio y repudio hacia algo o alguien. Lo que hago lo hago de una manera un poco mas madura y siempre encontrando palabras que ayuden a la redacción. Desde muy pequeño escribía textos sin sentido, representaba las cosas que veía, a mi manera, y las plasmaba en el papel, siempre buscando una opinión de mis maestros, para que incentivaran, de alguna forma, mi gusto.
Durante mi época de educación primaria, disfrutaba de la lectura, en aquel entonces solo me dedicaba a leer cuentos irreales y llenos de fantasía, no me importaba, lo importante era que empezaba a leer, y todo se lo debo a mi madre, ya que siempre nos fomentó el gusto por la lectura, que, hasta la fecha, lo sigue haciendo.
He crecido y creo que ese gusto se lo debo de fomentar a futuras generaciones, ese es mi deber como docente que llegare a ser. Es por eso que tratare de diseñar un programa que su principal meta sea fomentar la lectura y la redacción, ya que esos dos aspectos nunca podrán ser separados, para escribir se necesita cierta concordancia con la lectura, no podemos redactar sin entender lo que escribimos. En el juego del tiro al blanco trataremos de darle al centro, en la educación primaria, trataremos de fomentar la lectura y la escritura, ese es nuestro objetivo.
Es distintivo del ser humano su carácter sociable y, en consecuencia, la necesidad con los demás. A medida que transcurre el tiempo, tanto en la evolución humana como en el desarrollo de un niño, el hombre va adquiriendo, junto con sus experiencias, la información y los instrumentos necesarios para dar forma a sus mensajes, entonces se hace poseedor de un lenguaje.
La lectura y la escritura son dos actividades que en una relación de circularidad, se necesitan una de la otra (como lo había comentado anterioriormente), no pueden conseguirse por separado, escribir implica leer y leer el escribir, por ello los textos que son ilegibles, sin concordancia son imposibles cuando leemos. ¿Qué significa esto? Que al aprender a redactar lo hacemos en un orden lógico para que nuestro pensamiento sea comprendido.
Al nombrar la palabra “redacción”, la mayoría de las personas piensan que tal tarea es propia de un novelista, pocos aceptan que a todos nos llega un momento en el que debemos expresarnos por escrito, y es justo ahí en donde no sabemos ni que decir o escribir.
La redacción es una actividad que se aprende con el ejercicio continuo, la palabra escrita va tomando forma, es la representación gráfica de los pensamientos que necesitamos para nuestra comunicación.
Es muy importante la redacción ya que nos ayuda a organizar nuestro pensamiento para ser creativo en todas las materias, no nada más en español, incluso también fuera de la escuela. Aprender a redactar nos hace individuales, creadores de nuestro propio estilo y nos permite darnos cuenta de cada adelanto a través de todos los ejercicios, reglas, teorías, ortografía, etc. Que se desarrollan durante el ciclo escolar y son de gran ayuda para lograr cada día una mejor redacción.
Es muy importante conocer instrumentos que ayuden tanto en la lectura como en la escritura, tales como: la consulta del diccionario, el constante repaso de las reglas gramaticales y lo más importante, práctica y más práctica.
Para la redacción son muy importantes las ideas, es necesario especificarlas y buscar lo que se quiere desarrollar con ellas y si es posible, enunciarlas en una oración, de tal manera que no quede posibilidad de que la atención de la lectura se desvíe de la idea principal y que entre una confusión de palabras.
Es por eso que mi énfasis en la lectura y la redacción se hace presente, a los mexicanos nos cuesta pensar y las nuevas tecnologías idiotizan mucho a los estudiantes, dejando a un lado el aprendizaje. Trataremos de que eso no pase y luchar para salir adelante.
Chihuahua, Chih.